3 claves para elegir tus zapatos si llevas plantillas

Zapatos hay muchos así como tipos, tantos como puedas imaginar pero la verdad es que no todos son iguales. A la hora de elegir un calzado u otro entran en juego muchos factores y en el caso de las personas que lleven plantillas ortopédicas todavía más. Evidentemente el zapato no va a actuar como método corrector por sí solo, pero es la base para que la plantilla puede realizar su cometido. Si pensamos entonces en la importancia de los zapatos nos damos cuenta de que uno adecuado puede ser la diferencia entre que la persona corrija su dolencia o por lo menos la pueda sobrellevar, o que conviva con ella para siempre con las complicaciones y molestias que ello implica.

En Hispanitas sabemos lo difícil que resulta a veces a estas personas encontrar un zapato que realmente se acomode a su pie pues deben tener unas características muy específicas, por eso hemos decidido hacer este artículo en el que te explicaremos las características que debe tener el calzado en estos casos:

Anchura

Un zapato, sea del tipo que sea, normalmente ya dispone de sus propias plantillas que pueden ser removibles o estar pegadas. En el primer caso lo ideal es que la persona retire la plantilla propia del zapato y coloque la suya. En aquellos casos en los que la plantilla no pueda despegarse debemos fijarnos en que el usar una plantilla ortopédica suplementaria no afecte a la pisada.

Nuestra recomendación es que antes de comprar tu calzado te fijes en que la horma disponga de la suficiente anchura para albergar la plantilla sin afectar ni a la pisada ni a la propia comodidad del pie. Este debe poder moverse con facilidad y mantener los dedos con cierta holgura. El hecho de que el material del zapato sea flexible también ayuda mucho a que este se adapte a la nueva forma y la persona pueda mover el pie con total libertad. Los zapatos de Hispanitas están fabricados a base de pieles blandas y naturales para que nuestro calzado sea más agradable de usar además de trabajar nuestras propias hormas para aumentar su comodidad.

Las botas, botines, zapatos derby y sneakers te resultarán especialmente cómodas debido a que son zapatos anchos y podrás llevarlos perfectamente con tus plantillas.

Estabilidad

Si existe una característica que deba tener un buen zapato esa es sin duda la estabilidad y es que de lo contrario la pisada no es firme y puede hacer que la persona sufra caídas. Según el problema de cada persona deberá poner especial atención a la altura del zapato pues tener algo de cuña (2-3 cm) puede ser beneficioso para unos y realmente incómodo para otros. La clave está en encontrar tu altura perfecta y por supuesto que esta no afecte a la estabilidad del zapato. Los tacones altos y finos son los menos estables por lo que si calzas plantillas ortopédicas a diario debes llevarlos solo en ocasiones contadas.

Sujección

Otra de las características fundamentales que debe tener cualquier zapato para una persona que tenga algún tipo de dolencia podal es la sujeción. El hecho de no llevar el pie bien sujeto puede hacer que el objetivo de las plantillas no se cumpla e incluso empeore el estado de la persona. Nuestra recomendación es que te decantes por aquellos que dispongan de cordones o velcro, que dispongan de elásticos o aquellos que tienen caña como las botas o los botines. Se adaptarán la perfección a tu pie y podrás andar con ellos durante horas sin preocuparte de nada más que de disfrutar de tu día.

Recuerda, lo más importante es que encuentres el equilibrio entre estilo y comodidad porque el hecho de tener una dolencia no significa renunciar a estar guapa. En Hispanitas disponemos de un amplio catálogo para que encuentres tu zapato ideal. ¿Te animas?

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